Al final no había sido orsai.
Son puras calumnias del periodismo carroñero.
Mejor en todo.
Volverse loco no es el perder toda firmeza, sino el comprender la relatividad de lo incompleto, su constante fluidez y siempre teniendo el tino de no ver más que el equilibrio, lo perfecto y lo absoluto, que en última instancia es el centro y marco de todas las cosas.
2 comentarios:
Nice
muy bueno! muy bueno
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