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¡PUTOS TODOS LOS ENEMIGOS DEL PINTOÍSMO!
Mejor en todo.
Volverse loco no es el perder toda firmeza, sino el comprender la relatividad de lo incompleto, su constante fluidez y siempre teniendo el tino de no ver más que el equilibrio, lo perfecto y lo absoluto, que en última instancia es el centro y marco de todas las cosas.
2 comentarios:
Hermann Hesse tiene cabeza de tortuga.
Por cierto, a mi también me gustan las formas.
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